viernes, 12 de julio de 2013

Pildoras para el verano



Pleno verano. Cuarenta grados a la sombra y sudor por todas partes. Esa sensación de sentirte "sucio" aun habiéndote duchado hace cinco minutos. Entonces, casualmente estás paseando por la calle Suero de Quiñones, y pasas por delante de un local con la fachada roja. A través de los cristales puedes ver un pasillo amplio con mesas a ambos lados, y un hombre simpático te saluda mientras está secando un vaso. Algo te atrae, y decides pasar. Es en ese preciso instante cuando, sin haberlo planeado decides quedarte. El aire acondicionado te refresca por fuera, y los cócteles, los zumos o las cervezas lo hacen por dentro, mientras disfrutas de una de esas agradables conversaciones en peligro de extinción, en los cómodos sofás y con la mejor compañía.

Sin embargo te das cuenta de que todo ha sido un sueño, y todavía estás muriéndote de calor al otro lado de la puerta, con los goterones de sudor resbalando por las mejillas. ¿Entras o te quedas fuera? Tu decides. Claro está, la historia la creas tu. También puedes estar en tu casa leyendo esto, y utilizar una de las siete millones de razones que tienes para acercarte al Café Guiserís. Yo te desvelo una: porque te gusta.


Te esperamos en la calle Suero de Quiñones 13, metro Prosperidad (Línea 4) o Cruz del Rayo (Línea 9), junto al Auditorio Nacional. Abiertos para tí de 13:00 a 3:00, y teniendo en cuenta que todo lo que pidas antes de las 19:00 será a precio reducido, independientemente de la hora a la que te vayas.